QUE JAMAS EL EGOISMO NOS DESHUMANICE

En este primer post pasados unos días desde el fallecimiento de mi madre quiero haceros una reflexión sobre lo que he sentido y siento por mi madre, toda mi vida admire a mi madre por como era y por su bondad, pero fue a partir de que mi madre quedo discapacitada y me dedique por entero a cuidarla a estar las 24 horas del día a su lado, a luchar por sus derechos, cuando verdaderamente disfrute de mi madre, nada de lo que he hecho por ella supuso ningún sacrificio, al contrario he sido muy feliz entregándome en cuerpo y alma por que fuera lo más feliz posible.
Un día puse un post que he querido recuperar, no ya por vosotros los que me tanta solidaridad, cariño y apoyo nos habéis dado a mi madre y a mi, porque se que sois buenas personas, pero si por algunas personas anónimas que entren en mi blog y me lean para que este post que recupero hoy les haga reflexionar y si se ven en la necesidad como yo de tener que cuidar a un ser querido, no se olviden de el, que se entreguen que se sentirán muy orgullosos. No se si entenderéis bien mi mensaje, lo que quiero transmitir porque todavía me cuesta bastante expresarme. El post que hoy recupero trata de lo que siente un hijo, de lo arrepentido que está por no haber estado al lado de su madre cuando le necesito.

Este testimonio que os relato a continuación lo recibí un día por email de un hijo arrepentido.
Ayer....Ayer fue el día más triste de mi vida.Enterré a mi madre.Cuando mire su dulce y adorable cara y su cabello plateado por el tiempo, me di cuenta que esa seria la última vez que la vería.Muchos pensamientos vinieron entonces a mi mente.Cuando por las tardes o las noches no teníamos quien cuidara de los niños, acudíamos a mi madre porque no queríamos perdernos la función de cine o la fiesta en casa del amigo.Ella nunca se negó, jamás nos dijo que tenía otros planes o yo no quise darme cuenta.En una ocasión me prometí comprar una entrada y llevarla a ver una película que le gustase.Pero nunca compre la entrada.una vez nos encontramos en la panadería y vi que su suéter estaba un poco desteñido y viejo.Entonces pensé que debería llevarla al centro y comprarle uno nuevo, sabía que aunque ella lo necesitaba , nunca me lo pediría, así era ella.Pero siempre tuve otras cosas que hacer y mi madre siguió con su suéter viejo.Recuerdo su último cumpleaños, le mandamos unas azaleas blancas con una nota que decía, lamentamos no poder estar contigo en esta fecha, pero con estas flores te enviamos todo nuestro amor.Esa tarde había un partido de fútbol por la tele.Recuerdo la última vez que vi a mi madre viva, fue en la boda de un primo, se veía más viejecita y cansada, entonces pensé en mandarla a unas vacaciones con su hermano en la costa, que se soleara un poco para que no se viera tan pálida.Pero nunca lo hice, siempre tuve supuestamente cosas más importantes que hacer.Si yo pudiera regresar las hojas del almanaque, le compraría todos los suéters del mundo, la llevaría al cine y pasaría todos sus cumpleaños a su lado.Si yo pudiera regresar en el tiempo, la mandaría a ver a su hermano y a todos los sitios que quisiera ir.Pero es muy tarde ya ella está en el cielo y yo estoy aquí enfermo de corazón por todas las oportunidades perdidas.Que diferente hubiera sido si hubiera leído una carta como esta.¡¡¡TU QUE LEES ESTO, SI TIENES UNA MADRE TODAVÍA, CUIDALA HAZLA FELIZ, NO HAY DICHA MÁS GRANDE, NI PLACER MÁS SANTO, QUE CUIDAR DE TU MADRE!!!