Problemas como el que sufrió este discapacitado de Cadiz son moneda corriente en muchas ciudades españolas, a veces las soluciones son sencillísimas, un semáforo, el rebaje de un bordillo, pero la desidia de los gobiernos autonómicos y ayuntamientos hacen que el día a día de muchos discapacitados se convierta en un calvario.
¿Es que es más importante la reforma de la ley del aborto, la cultura de la muerte, que los cultura de los derechos, de la vida digna?
¿Es que la eliminación de barreras no vende, no es rentable en votos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario