LA NUEVA WEB

domingo, 22 de febrero de 2009

PARA LOS POLITICOS NO HAY CRISIS





Mientras muchos españoles viven sin techo, mientras otros españoles tienen serias dificultades para llegar a fin de mes y pagar la hipoteca, el ministro Bermejo disfruta de un palacete totalmente gratis, personal de servicio incluido.
Lujo y confort para disfrute del ministro.

Bermejo goza en Quintos de Mora de un «palacete» de 600 metros cuadrados con seis baños, cinco habitaciones y piscina
Lujo y confort para disfrute del ministro Bermejo
En la finca toledana se respira tranquilidad. Pese a parecer un «palacete», la decoración es sobria y sin excesos.22 Febrero 09 - Madrid - F. de la Peña
Madrid- No debía de estar incómodo el ministro Bermejo en la finca toledana de Quintos de Mora en la que cazaba «a cuerpo de rey» sin sacar un solo billete de su cartera. Y no es de extrañar, pues el «palacete» en el que daba rienda suelta a su pasión cinegética cuidaba hasta el último detalle para no echar nada en falta. Un perfecto enclave para recibir a mandatarios extranjeros, aunque sólo para tan altos menesteres, tal y como hiciera el ex presidente del Gobierno José María Aznar, en el que prima la tranquilidad. En esta finca Patrimonio del Estado, de 6.700 hectáreas, se levanta una casa de unos 600 metros cuadrados de dos plantas con todas las comodidades necesarias para disfrutar sin ser molestado en plena naturaleza. En total, la vivienda en la que disfrutaban Bermejo y su familia cuenta con cinco dormitorios -los dos principales en la planta superior y otros tres dobles en la inferior-, todos ellos con baño con ducha, salvo el principal, que también cuenta con una bañera. Junto a esto, un enorme salón de techos altos y con vigas de madera noble coronándolo. Y todo decorado de manera confortable, sin exceso de lujos ni ornamentaciones, aunque muy bien elegido y combinado. El resto de las estancias también se caracteriza por la sobriedad y la ligereza en las decoraciones, con colores blancos o salmón y nada que «cargue» y rompa la tranquilidad que se respira en el ambiente.Pero la «casita» también tiene varios patios y terrazas cubiertas que se han convertido en improvisados salones y comedores al aire libre, y en cuyas paredes se exhiben algunos trofeos de caza. En esta parte de la vivienda también cobran mucha importancia las enormes vigas de madera maciza del techo y las columnas de este mismo material. Aquí, unos imponentes e impolutos sofás blancos y un par de mesas completan la decoración de esta zona exterior.Otra de las habitaciones destacadas de la casa es la cocina, muy grande y con un «office» donde comer. Y rodeándolo todo, unos cuidados y enormes jardines con una piscina de unos 20 metros de largo. Todo esto, que en épocas anteriores tuvo un uso más oficial, está ahora al servicio de unos pocos «elegidos».Otro de los detalles de esta vivienda es la personalización de las vajillas. Así, por ejemplo, todas las tazas de café llevan la inscripción «QM» (por Quintos de Mora) y una corona encima. Pero, pese a disfrutar gratuitamente y sin limitaciones de todo este confort, el humor y la educación del ministro Bermejo dejaba mucho que desear, según confirmaron fuentes cercanas a la finca consultadas por LA RAZÓN, que aseguraban que «hacía lo que le daba la gana» y que su comportamiento era el de un «déspota». Pese a que ayer se aseguraba que el ministro de Justicia prohibía cazar a los guardeses de la finca, el Ministerio de Justicia desmintió este punto, señalando que Bermejo «tiene un absoluto respeto y consideración por todo el personal de esta finca». Sin embargo, las fuentes anteriormente citadas señalaron que «lo que veta a los guardas son las esperas nocturnas de cochinos, que las quiere hacer él solo». El resto «sí que lo permite, como la caza selectiva o descastes, que realizan los guardeses casi todos los jueves», comentan.Además, también rechazan otro apunte que se hace desde el Ministerio. En Justicia aseguran que el ministro ha estado en la finca de Quintos de Mora en «contadas ocasiones», mientras que las citadas fuentes y los testigos no dudan en asegurar que han sido «bastantes, bastantísimas veces» las que ha disfrutado de las comodidades de la espectacular finca de la localidad toledana de los Yébene.
Fuente: La Razón.es
Villa PSOE.
Más de cuatrocientas personas se manifiestan frente a la villa gallega de José Blanco.

Más de cuatrocientas personas se han manifestado este sábado frente a Villa PSOE, urbanización de lujo que se está construyendo en la Isla de Arosa (Pontevedra) más cerca del mar de lo que permite la Ley de Costas, y en la que han adquirido opciones de propiedad altos cargos del PSOE, entre ellos José Blanco, y de la Administración socialista tanto regional como nacional.
La convocatoria, organizada por la Confederación de Afectados por Estafas Inmobiliarias (Cafines), fue la que destapó el escándalo, y la misma a la que este sábado se han sumado multitud de personas que han visto como sus propiedades han sido derribadas por incumplir la Ley de Costas.
Blanco no se ha pronunciado sobre esta cuestión.
Ni que decir tiene que en las casas y palacetes que viven los políticos, no existen barreras arquitectónicas,

3 comentarios:

Anónimo dijo...

el acoso y derribo a bermejo continúa, se le ve en todas partes, a ver si aguanta

Eulogio Diéguez Pérez (Logio) dijo...

Yo tengo un familiar que es maestro en un centro escolar y cada vez que intento echarle en cara las vacaciones que tienen (mañana lunes, por ejemplo) y que yo no tengo me dicen que haber opositado para maestro.
Aquí es parecido haber llegado a ministro. je, je.

Ahora en serio, podían cortarse un poco de ejemplo al menos en tiempos malos y tener un poco de cuidado con según que cosas.

BOIRA_A dijo...

Se quejaban de que Franco tuviera elo pazo de Meiras y el Azor, pero estos nuevos ricos estan enpobreciendo a la collares y al rana Como se nota que tiene la llave de todo elo patrimonio nacional usandolo a su antojo

Yo quiero apuntarme a pasar una temporada en tan idilico sitio.

Una ya es jubilada y como no tiene posibles bien necesito descansar en algun lugar