He recibido una carta de un dirigente político al que me dirigí hace meses, ¡muchos meses!
La carta en cuestión no habla de soluciones al problema que padecen muchos discapacitados, (Eliminación de barreras arquitectónicas) eso si la carta esta saturada de OS y AS, discapacitados/discapacitadas, afectados/afectadas, ARROBAS para dar y vender, en resumen, muchas gilipolleces y ninguna solución.
En este país de falsos progres solidarios, con poner arrobas y mucho OS Y AS, ya piensan que han cumplido con sus obligaciones.
Me he cabreado un poco porque ya estoy harto de tanta estupidez y me ha venido a la memoria un articulo que publico Arturo Perez Reverte que refleja muy bien el grado de gilipollez que nos invade.
A la ministra española de Igualdad y Fraternidad, Bibiana Aído, que pasará a los anales de la estupidez nacional por lo del miembro, la miembra y la carne de miembrillo, le han dado en las últimas semanas las suyas y las del pulpo, así que no quiero ensañarme. Podría, puesto a resumir en dos palabras, llamarla tonta o analfabeta. Supongo que, ateniéndonos a su estólida contumacia cuando fue llamada al orden por gente respetable y docta, a esa ministra podrían irle como un guante ambos epítetos. Pero no lo creo. Quiero decir que no tengo la impresión de que Bibiana Aído sea tonta ni analfabeta. Por lo menos, no del todo. O lo justo. Lo que pasa es que está muy mal acostumbrada. Bibiana Aído, que es de Cádiz, procede de esa nueva casta política de feministas crecida en Andalucía a la sombra del régimen chavista; que así, dándoles cuartelillo, las tiene entretenidas y goteando agua de limón. Esas pavas, que han convertido una militancia respetable y necesaria en turbio modo de vida y medro, no tienen otra forma de justificar subvenciones y mandanga que rizar el rizo con piruetas cada vez más osadas, como en el circo. La lengua española, que en este país miserable ha resultado ser arma política útil en otros ámbitos, les viene chachi. Por eso están embarcadas en una carrera de despropósitos, empeñándose, cuatro iletradas como son, en que cuatrocientos millones de hispanohablantes modifiquen, a su gusto, un idioma donde cada palabra es fruto de una afinada depuración práctica que suele ser de siglos, para adaptarlo por la cara a sus necesidades coyunturales. A su negocio. Lo que pasa es que, en el cenagal de la política española, cualquier cosa viene de perlas a quienes buscan votos de minorías que, sumadas, son rentables. Sale baratísimo. Sólo hay que destinar unas migajas de presupuesto y darle hilo a la cometa. Así andan las Bibianas de crecidas, campando a su aire en una especie de matonismo ultrafeminista de género y génera donde, cualquiera que no trague, recibe el sambenito de machista. Y así andamos todos, unos por cálculo interesado y otros por miedo al qué dirán. Los doctos se callan con frecuencia, y los ignorantes aplauden. Incluso hay quienes, después de cada nueva sandez, discuten el asunto en tertulias y columnas periodísticas, considerando con gravedad si procede decir piernas cuando se trata de extremidades en una mujer, y piernos cuando se trata de un hombre. Por ejemplo. En todo esto, por supuesto, la Real Academia Española y las veintiuna academias hermanas de América y Filipinas son enemigo a batir. Según las feminatas ultras, las normas de uso que las academias fijan en el Diccionario son barreras sexistas que impiden la igualdad. Lo plantean como si una academia pudiera imponer tal o cual uso de una palabra, cuando lo que hace es recoger lo que la gente, equivocada o no, justa o no, machista o no, utiliza en su habla diaria. «La Academia va siempre por detrás», apuntan como señalando un defecto, sin comprender que la misión de los académicos es precisamente ésa: ir por detrás y no por delante, orientando sobre la norma de uso, y no imponiéndola. Voces cultas, y no sólo de académicos –Alfonso Guerra se unió a ellas hace poco–, han explicado de sobra que las innovaciones no corresponden a la RAE, sino a la sociedad de la que ésta es simple notario. En España la Academia no inventa palabras, ni les cambia el sentido. Observa, registra y cuenta a la sociedad cómo esa misma sociedad habla. Y cada cambio, pequeño o grande, termina siendo inventariado con minuciosidad notarial, dentro de lo posible, cuando lleva suficiente tiempo en uso y hay autoridades solventes que lo avalan y fijan en textos respetables y adecuados. De ahí a hacerse eco, por decreto, de cuanta ocurrencia salga por la boca de cualquier tonta de la pepitilla, media un abismo. Así que tengo la obligación de advertir a mis primas que no se hagan ilusiones: con la Real Academia Española lo tienen crudo. Ahí no hay demagogia ni chantaje político que valga. Ni Franco lo consiguió en cuarenta años –y mira que ése mandaba–, ni las niñas capricho del buen rollito fashion lo van a conseguir ahora. En la RAE somos así de chulos. Y lo somos porque, desde su fundación hace trescientos años, esa institución es independiente del poder ejecutivo, del legislativo y del judicial. Su trabajo no depende de leyes, normas, jueguecitos o modas, sino de la realidad viva de una lengua extraordinaria, hermosa y potente que se autorregula a sí misma, desde hace muchos siglos, con ejemplar sabiduría. De forma colegiada o particular, a través de sus miembros –que no miembras–, siempre habrá en esa Docta Casa una voz que, con diplomacia o sin ella, recuerde que, en el Diccionario, la palabra idiotez se define como «hecho o dicho propio del idiota».
11 comentarios:
Qué grande es Perez Reverte!!! Encantada de haber caído aquí por casualidad. Te seguiré leyendo :)
Es increible pero es la verdad misma...
Tampoco creo que esperases mucho de los politicos...
Lo primero que se me ha venido a la cabeza al leerte ha sido: Verguenza!
Realmente siento vergüenza de los politicos y gran parte de la sociedad...vaya vergüenza de pais!
Sigue luchando, no desistas...
un besote!
Muchas gracias .
Por cierto..¿te importaria que copie esta Entrada (tuya) alguno de mis (dos) blogs(CITANDOTE,EVIDENTEMENTE).
YA ME DIRAS...
Muchas gracias .
Por cierto..¿te importaria que copie esta Entrada (tuya) alguno de mis (dos) blogs(CITANDOTE,EVIDENTEMENTE).
YA ME DIRAS...
como decis ¡que verguenza de pais.
Jarillo, por favor no me preguntes si puedes copiar est post, este blog es de todos, copia lo que quieras.
Un abrazo.
Pues a mi no me da verguenza, me dan pena, el tiempo hace justicia siempre y cada uno recibe tanto o mas de lo que da, asi que...
Besitos guapo, ya sabes que estamos contigo para lo que haga falta. ;)
Besitosssssssssss
Muy bien hablado por Pérez Reverte, me ha gustado. Me agrada haberte encontrado saltando de blog en blog. Me llevo tu link y me apunto a tus seguidores. Felices fiestas. UN saludo de josef!
Normalmente, yo solo quitaría las palabrotas de los comentarios de Reverte, a quien tengo el gusto de conocer personalmente.
Al margen de las formas, coincido con el plénamente.
Saludos!
Todas sus palabras son certeras¡¡;))
Un besooote amigo Javier¡¡¡
Mi querido amigo Javier que quieres que te diga desde que aquella profesora de Literaura tuvo aquella sonora metedura de pata de los jovenes y las jovenas, van todos a ver quin dice la ultima
de los politicos no podemos esperar nada, son un trozo de ladrillo, un trozo de corcho que solo s emueven cuando les toca a ellos desde el rey al ultimo politico de pacotilla
Saludos y seguimo Tio Jorge
Querido javier..la pena es que estemos acostumbrados ya a este tipo de cosas..
A veces me gustria que algo nos sacudiera de tal forma ..pero evidentemente no es asi... como siempre solo me queda mandarte besos y preguntarte por como estas vos y tu mamá!!!
cuidate mucho !!!
Publicar un comentario